¿Sos de los que siente que si no usás Inteligencia Artificial (IA) te estás quedando afuera? Tranqui, no sos el/la único/a. En cada charla con responsables de PyMEs, emprendedores o líderes de equipos aparece la misma inquietud: “¿Debería estar haciendo algo con IA? ¿Por dónde empiezo?”. No tenés que correr detrás de cada novedad, pero sí podés incorporar IA de forma estratégica y responsable, sin perder la cabeza (ni la humanidad).
Por eso armé este documento pensado para acompañarte paso a paso, sin hype. Lo titulé: “Empatizar, Potenciar, Acompañar: cómo hacer de la IA una aliada en tu PyME” y está diseñado para vos, que no querés repetir fórmulas vacías ni llenarte de herramientas que después nadie usa. Lo que querés – como tantas personas que la reman a diario – es mejorar procesos, tomar decisiones con más criterio, y no sentir que estás a la deriva en esta revolución tecnológica.
La IA está redefiniendo la forma de trabajar, como lo hizo Internet en su momento. Ya no es exclusivo de las grandes empresas. Hay miles de herramientas accesibles, incluso para quienes no saben programar. Pero no alcanza con “tener IA”. Lo importante es cómo la integrás, para qué, con qué equipo y con qué mirada. Porque si no sabés qué problema estás resolviendo, la herramienta más brillante puede volverse buena para nada.
Con el documento te propongo algo distinto: no empezar con tecnología, sino con estrategia. Antes de automatizar, conectá. Reconectá con tu organización, con tus procesos, con tu gente. Hacé un inventario de tus activos digitales. Y si hay cosas que ya no aportan valor, animate a soltar. Porque en esta época, todo lo que no aprende, se vuelve obsoleto.
¿Sabías que significa el término ADD? … Asset Digital en Desuso y es el nombre que inventé para nombrar a aquellos activos digitales que aunque todavía existen en tu organización, han perdido valor, utilidad o sentido estratégico, como un sitio web abandonado, un chatbot que repite sin sentido o una base de datos que nadie actualiza. Están ahí, pero no hacen nada. Identificarlos es el primer paso para elegir bien dónde tiene sentido sumar IA, y no invertir tiempo y recursos en tecnología que después no se usan.
Además, el documento plantea que la IA no es solo para tareas repetitivas. También sirve para transformar productos, anticipar decisiones, rediseñar modelos de negocio o personalizar experiencias para clientes. Pero ojo: sin una estructura mínima de gobernanza o cultura digital, esas promesas se esfuman. Y lo técnico, por más espectacular que sea, no reemplaza una estrategia pensada desde lo humano.
Para eso propongo una metodología de implementación basada en tres verbos poderosos: Empatizar, Potenciar y Acompañar. No es una fórmula mágica. Es una forma de pensar el cambio. Porque lo difícil no es usar la IA, lo difícil es integrarla en una organización viva, con sus tiempos, miedos, saberes y realidades. No alcanza con instalar una app: hay que acompañar a las personas que la van a usar.
También incluyo ideas concretas para bajar la ansiedad: cómo evaluar herramientas, cómo construir una rutina mensual de actualización, qué preguntas hacer antes de adoptar algo nuevo, cómo probar de forma segura y cómo aprender sin ahogarte en la información. Porque esto no es una carrera por ver quién tiene más IA, sino quién la usa con más criterio.
Y como sé que muchas veces el cambio genera resistencia, en el cierre pongo el foco en lo más difícil: el acompañamiento. Ahí es donde se define si la IA sirve o no. Cuando hay dudas, cuando la novedad pasa, cuando hay que ajustar. Por eso, sostener el proceso es tan importante como iniciarlo.
Si estás liderando una PyME o emprendimiento, y querés entender cómo incorporar IA sin perder tu estilo, tu cultura y tus prioridades, este documento es para vos. Lo podés leer con mate en mano, subrayar, compartir con tu equipo, y usarlo como guía en este camino que recién empieza. No se trata de correr detrás de la IA. Se trata de decidir cómo querés avanzar, con quién y para qué.
Si te interesa podés descargarlo ingresando acá.
Estoy para ayudarte 🙂